Oribe Peralta se convirtió en referente de aquella Selección Olímpica que consiguió la medalla de oro tras derrotar en la final a Brasil. A partir de ahí, su carrera despuntó como pocas y empezó a volverse un ídolo de propios y extraños.
El 'Cepillo' fue fundamental en la obtención del oro, ya que anotó los dos goles de la final y además marcó en Fase de Grupos y Semifinales. Se marchó de Londres 2012 como el tercer máximo goleador de la competencia.
Su papel como refuerzo fue más allá de la cancha, ya que fue vital durante el desarrollo de los entrenamientos y el recorrido por tierras olímpicas. Así fue como lo reveló durante una entrevista para Marca Claro.
El delantero de Chivas, en ese entonces de Santos Laguna, fue claro al asegurar que su papel en la aventura olímpica fue más que nada para complementar lo que ya estaba hecho, a pesar de que había gente que no confiaba en ellos.
Ese grupo ya estaba más que armado, yo solamente llegué a complementar un poco lo que ya tenían, a adaptarme a lo que ya venían trabajando... El esfuerzo de cada día se contagiaba para que pusieran lo mejor de sí. A final de cuentas mucha gente no creía en nosotros, pero nosotros lo teníamos muy claro sabíamos que era una oportunidad para trascender.
Oribe Peralta
Sobre aquella hazaña olímpica, Oribe mencionó sentirse afortunado por ganar la medalla de oro ya que lo define como una sensación indescriptible, eso sí, sin olvidarse que también disputó los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Finalmente, aseguró que en la final ante la 'Canarinha' sintió miedo en el momento que les descontaron en el marcador. "Es Brasil, tiene jugadores de mucha calidad que te pueden hacer un gol en cualquier momento aunque falte muy poco tiempo".