Durante el partido pendiente de este miércoles entre Cruz Azul y León, en el cual los 'cementeros' redujeron sus posibilidades de Liguilla directa, en el Estadio Azteca se hizo presente el polémico y prohibido grito homofóbico.
El árbitro se vio obligado a detener las acciones debido a la insistencia de los aficionados, inclusive hubo petición por parte de los futbolistas 'cementeros' para dejar de hacerlo, esto durante y después del encuentro ante la 'Fiera'.
Tras una serie de investigaciones por parte de la Comisión Disciplinaria, se ha emitido un comunicado en el que se da a conocer la sanción respectiva para la 'Máquina Cementera', quien aún no define del todo su futuro.
De acuerdo con el texto del portal de la Federación Mexicana de Futbol, Cruz Azul ha sido sancionado con un veto de estadio por un partido, ajustándose al protocolo implementado para combatir el grito discriminatorio.
Al mismo tiempo se dio a conocer una advertencia para la directiva 'cementera' sobre su conducta a futuro, ya que en caso de prevalecer este tipo de actos, se le impondrán sanciones todavía más severas a la ya aplicada.
Esto quiere decir que si Cruz Azul consigue quedar en quinto, sexto, séptimo u octavo lugar de la clasificación, tendrá que jugar el repechaje a puerta cerrada, independientemente del rival al que le toque hacer frente.