Gustavo Ferrareis se convirtió en protagonista tempranero del partido entre Puebla y Chivas luego de sufrir una escalofriante lesión que lo orilló a abandonar el terreno de juego en el "carrito de las desgracias".
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Corrían los primeros ocho minutos de partido cuando Ferrareis disputó una pelota con Cristian Calderón, en la que para su mala fortuna salió perdiendo debido a la fractura de tobillo derivada de la barrida que realizó.
El mediocampista brasileño tuvo la mala suerte de que se atorara su pie izquierdo en el césped y que de igual manera, terminara dejando ir todo su peso sobre el mismo pie.
La jugada generó consternación en el estadio y en el terreno de juego, donde incluso Martín Barragán quedó afectado por la lesión de su compañero. Se alejó de la zona donde atendían a Gustavo Ferrareis y se soltó a llorar en el centro del campo.
El delantero mexicano fue consolado por sus compañeros, mientras Gustavo Ferrareis era atendido para posteriormente salir entre aplausos de la cancha del Akron. Contrario a lo que se pudiera pensar, el brasileño salió con total calma del terreno de juego.
A pesar de que todavía se desconoce la gravedad de la lesión, se estima que el diagnóstico no se lo más positivo posible. El Puebla está a la espera de recibir información al respecto de la escalofriante lesión de Gustavo Ferrareis.
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