América sigue sin encontrar refuerzos definitivos para la temporada 2022-2023, el único nombre que ha amarrado, y de manera temporal, es el de Jürgen Damm directo desde el Atlanta United de la MLS.
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El equipo 'azulcrema' no ha podido negociar un fichaje clave en lo que va del mercado veraniego, situación que ya preocupa a los aficionados y que los ha llevado a culpar a Santiago Baños, director deportivo de la institución.
El nombre más fuerte que ha sonado hasta el momento es el de Pablo Solari, extremo argentino de 21 años que actualmente se desempeña en el Colo-Colo de la Primera División de Chile.
Pablo Solari es un futbolista que se ha afianzado en su equipo desde su llegada en noviembre de 2020, firmando contrato hasta diciembre de 2025, por lo que su panorama actual sería una traba en las negociaciones.
América insiste en llevárselo aunque de acuerdo con los últimos reportes en Sudamérica y México, Colo-Colo se niega a soltar a este promesa por menos de cinco millones de dólares, cantidad que fue ofrecida por los 'azulcremas', pero al mismo tiempo rechazada.
La directiva del 'Cacique' pretende una suma de 10 millones de dólares y, además de eso, la garantía de soltar al futbolista hasta noviembre de 2022 cuando finalice el campeonato.
Dicha situación ha generado polémica debido a que Pablo Solari ha mostrado interés por jugar en la Liga MX con el América, por lo que buscará convencer a la directiva de poder salir y probarse en un nuevo destino.
No es la primera ocasión que América muestra insistencia con Pablo Solari; el pasado mes de enero buscó su contratación pero Colo-Colo no lo soltó por estar disputando la Copa Libertadores.
Además de eso, se habla de que Andrés Fassi (exdirectivo de Pachuca), encargado de Talleres de Córdoba (ex equipo de Solari), "metería su cuchara" para lograr que el argentino aterrice en tierras mexicanas.