Como ya es costumbre, el Clásico Regio Femenil es uno de los partidos más esperados en la división, sin embargo la más reciente edición quedó manchada por el arbitraje. Desde un gol mal anulado hasta un fuera de lugar inexistente que provocó una tarjeta roja, terminaron por afectar el espectáculo.
Las acciones tuvieron gran dinámica con ambos equipos buscando la victoria que las llevara con mejor ritmo de cara a la liguilla pero el árbitro se robó los reflectores.
En el primer tiempo hubo al menos dos jugadas polémicas que pudieron marcar el camino del encuentro, principalmente un gol mal anulado a Desirée Monsiváis.
Christina Burkenroad mandó un centro al área que la goleadora remató y metió a las redes, sin embargo el árbitro asistente marcó que el balón había salido del campo cuando no fue así.
La otra jugada fue un empujón sobre Mia Fishel dentro del área, mismo que provocó la caída de la estadounidense pero no fue sancionada como penal.
Para el complemento, la intensidad subió junto a la lluvia que cayó sobre el césped del estadio rayado y el árbitro Ricardo Emmanuel Chávez volvió a ser protagonista.
En un contragolpe de las locales, se marcó un fuera de lugar de Burkenroad tras un balón que provenía de una rival, lo que provocó los reclamos de Rebeca Bernal y así se ganó la segunda tarjeta amarilla.
Al final el encuentro terminó empatado sin goles pero el descontento fue generalizado, algo que se reflejó en los reclamos de redes sociales.