La violencia que se desató en el Estadio Corregidora entre barras del Querétaro y aficionados del Atlas provocó que más de una docena de personas resultaran heridas y al menos tres se encuentran en estado grave.
Las imágenes de lo que ocurrió en el lugar le dio la vuelta al mundo, ya que varios medios internacionales le dieron seguimiento a los hechos.
Mientras tanto, varios aficionados del Atlas han contado lo que ocurrió en el partido que fue suspendido en el segundo tiempo, debido a la invasión de la cancha de aficionados y familias que buscaban resguardarse.
La mayoría de las atlistas coinciden que la policía nunca los cuidó e incluso no había elementos de seguridad suficientes; en varios videos que circulan en redes se ve como un guardia de seguridad hablaba por teléfono, mientras la batalla campal sucedía en las tribunas.
“La policía les abrió las puertas”
Fran Ceballos, aficionado del Atlas, contó cómo fue que de pronto llegaron integrantes de la porra de Querétaro y los encapsularon.
“Se detuvieron en la zona familiar, empezaron a golpear a familias del Atlas. Siguieron corriendo hacia nosotros, nos encapsularon y la policía, en vez de protegernos, les abrió las puertas de las rejas para que nos pudieran golpear", comentó.
Ceballos asegura que a los aficionados del Atlas los revisaron y les quitaron todo lo que podría ser peligros, en cambio los aficionado del Atlas portan hasta picahielos.
"Probablemente estaban todos ya de acuerdo. Hubo una revisión bastante estricta para nosotros, no podíamos pasar llaves, monedas, carteras, cadenas, ningún anillo o cinturón. Ellos (los aficionados de Querétaro) traían picadillos, unos traían pistola, no sé de dónde las sacaron, traían piedras también", comentó.
“La policía no hizo nada”
Mientras tanto, el chofer de la porra del Atlas, contó que ya tiene años llevando a estos grupos y nunca había visto algo similar. El autobús fue agredido por gente de los Gallos.
“Yo tengo muchos años moviendo a la porra de Atlas, de Chivas, de América aquí en Guadalajara. En los 15 años que tengo, nunca he vivido como lo que viví hoy. Lo que pasa es que había muy poca vigilancia, se salió de control. Esto puede detonar, pero lo que vivimos ahí fue algo como de crimen organizado. No eran aficionados de Querétaro y los policías no hacían nada“, comentó.
“La policía y seguridad se fueron”
Otro aficionado también contó que en el estadio la policía nunca apareció, y que lo pocos que había los abandonaron.
“El problema fue que la policía y los de seguridad se fueron; eso se dio en el estadio, no había nadie de seguridad”, relató.
Hasta el momento y de acuerdo con el reporte del gobierno de Querétaro hay varios lesionados y sólo tres de gravedad.