Desde que Gianni Infantino tomó la presidencia de la FIFA, en 2016, ha certificado una postura fija respecto a la "modernización" del futbol, es por eso que en estos cinco años ha decidido implementar modificaciones al juego e incluso a su reglamentación.
Una de las ideas más pólemicas por parte del italo-suizo es el de celebrar el Mundial con una periodicidad de cada dos años, aunque dicha idea no ha sido tomada de manera positiva por parte del gremio.
Ahora, con la Copa América y la Eurocopa finalizadas, además de tener el Mundial de Qatar 2022 a la vuelta de la esquina, Infantino pretende calendarizar los torneos continentales de todas las confederaciones de manera bienal.
Esto no quiere decir que deja atrás su idea sobre la Copa del Mundo, ya que contempla que los campeonatos continenales se celebren en años alternos al Mundial y así generar una gran competencia entre selecciones.
Arsène Wenger, director de desarrollo del futbol mundial en la FIFA, es uno de los asociados que apoyan la idea del abogado políglota ya que cree que la calidad del futbol irá en aumento con rivalidades de esa frecuencia.
No habrá más partidos que antes y a los jugadores las selecciones les solicitarán con menos frecuencia. La idea es mejorar la calidad del juego y de las competiciones. No hay ninguna intención financiera detrás, máxime cuando la FIFA reparte el dinero a todas las federaciones del mundo".
Arsène Wenger para L'Équipe
Para evitar mayores cuestionamientos por esta decisión, se tiene contemplado que se fijen periodos de descanso obligatorios para cada uno de los futbolistas participantes. Se habla de 25 días tras la disputa de las fase finales.