Los futbolistas suelen elegir para qué equipo juegan, y aunque a nivel selección es más complicado, existen casos destacados en los que la historia habría sido muy distinta si un equipo nacional hubiera contado o no con cierto futbolista. Y es el caso de Polonia.
La selección que tiene a Robert Lewandowski, actual jugador del FC Barcelona, ha tenido en su historia a otros grandes goleadores como Zbigniew Boniek, delantero que jugó en la Juventus y la Roma, en Italia, y defendió a su país en los mundiales de Argentina 1978, España 1982 y México 86. En las tres competiciones, anotó seis goles.
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Boniek fue la referencia del futbol polaco hasta la aparición de Lewandowski. Pero hubo otro jugador nacido en Polonia que alcanzó la gloria máxima en el Mundial aunque decidió defender la playera de otra selección nacional.
Se trata de Miroslav Klose, quien nació en Opole, Polonia, pero jugó para la selección alemana, de la que es el máximo goleador histórico, así como el mayor anotador en la historia de las Copas del Mundo.
La madre de Klose fue seleccionada de balonmano para Polonia hasta en 82 ocasiones, y su padre fue futbolista en Polonia y Francia.
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Cuando Klose tenía nueve años, su familia se mudó a Alemania y ahí comenzó el romance del delantero, ahora entrenador en Austria, con el futbol germano, al que prefirió defender en lugar del de su lugar de nacimiento.
¿La historia de Polonia y Alemania en competiciones internacionales habría sido distinta?
Miroslav Klose incluso superó como máximo goleador en Mundiales a Ronaldo Nazario, exjugador de PSV, Barcelona, Inter, Real Madrid, y estrella histórica del futbol brasileño.