- 30 de septiembre de 2024
El seleccionado argentino salió del estadio y se dirigió inmediatamente al aeropuerto para abordar el chárter que los llevaría a casa.

El clásico sudamericano se tuvo que suspender, luego de que miembros de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) intentaron llevarse a cuatro jugadores argentinos por no cumplir con los protocolos sanitarios que hay en Brasil.
Después de permanecer cerca de tres horas en el vestuario mientras se aclaraba la situación con las autoridades brasileñas de salud, los jugadores de Argentina salieron de la Arena San Pablo para dirigirse al aeropuerto.
La salida de la Albiceleste del feudo brasileño con todos sus integrantes fue gestionada por Daniel Scioli, embajador de Argentina en Brasil.
El diplomático hizo un viaje exprés de Brasilia a San Pablo para ayudar a los futbolistas, puesto que deseaba que sus paisanos dejaran el país sin ningún contratiempo.
Por otra parte, el presidente interino de la Confederación Brasileña de Futbol, Ednaldo Rodrigues, afirmó que los cuatro futbolistas argentinos involucrados tenían permiso para jugar y después serían deportados del país.
Cabe resaltar que Emiliano Buendía, Emiliano Martínez, Giovani Lo Celso y Cristian Romero no podían jugar, ya que llegaron de Inglaterra y tenían que cumplir con una cuarentena, la cual no cumplieron y por eso la Anvisa quería deportarlos.
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