- 05 de diciembre de 2025
Diferentes opiniones respecto al grupo más difícil del Mundial 2026, mientras los aficionados apuntan al C hay otro más poderoso
El sorteo del Mundial 2026 dejó atrás meses de especulación y se convirtió, una vez más, en un espectáculo global. La ceremonia celebrada en el Kennedy Center de Washington D.C. reunió a figuras históricas del deporte como Tom Brady, Wayne Gretzky, Aaron Judge y Shaquille O´Neal, quienes acompañaron a Rio Ferdinand en la extracción de las esferas que definieron el camino mundialista.
Entre aplausos, luces y el tridente anfitrión como protagonista, quedaron definidos los ocho grupos que iniciarán la competencia en junio. México abrió la ceremonia al encabezar el Grupo A como anfitrión, mientras que Brasil, Estados Unidos y Canadá tomaron el resto de las llaves principales. Y, como ocurre cada cuatro años, tras el acomodo oficial llegó el debate eterno: ¿cuál es realmente el "grupo de la muerte"?
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¿El grupo más difícil del Mundial 2026? Datos vs fans
Una buena parte de la conversación inicial apuntó al Grupo A, donde está México, por la narrativa: un debut contra Sudáfrica con ecos de revancha mundialista, un rival coreano incómodo y un repechaje europeo que podría sumar a Dinamarca o República Checa. Sin embargo, cuando el análisis cambia de la percepción al dato, el foco se mueve rápidamente hacia otro sector: el Grupo C.
Aficionados apuntan al Grupo C
Brasil domina el bombo 1 con el peso histórico de un favorito permanente, pero su presencia no es lo único que eleva el nivel del grupo. Marruecos llega como semifinalista de 2022 y una de las selecciones más cohesionadas del planeta, con un ciclo que combina continuidad, físico y una identidad completamente asentada. Escocia, por su parte, fue uno de los equipos europeos más sólidos en la eliminatoria: orden defensivo, alta intensidad y resultados recientes que lo colocan como un rival que difícilmente regala espacio.
Y luego aparece Haití, que muchos fans subestiman por nombre, pero no por plantel. La selección caribeña llega con una base nutrida de futbolistas en ligas europeas: Jean-Ricner Bellegarde (Wolverhampton, Premier League), Hannes Delcroix (Burnley, Premier League), Josué Casimir (Auxerre, Ligue 1) y Ruben Providence (Almere City, Países Bajos). Una plantilla más física, veloz y experimentada.
El verdadero grupo de la muerte
Si bien el debate popular ha señalado al Grupo C como uno de los más complejos, existe un candidato sólido para llevarse el título de verdadero grupo de la muerte: el Grupo F. Este sector reúne a tres líderes de sus respectivas eliminatorias, cada uno con un momento competitivo distinto pero igual de contundente.
Ecuador llega como segundo lugar de la clasificación de Conmebol —para muchos, la eliminatoria más dura del mundo— con una generación física, joven y altamente estructurada.
Alemania encabeza la ruta europea tras un ciclo de reconstrucción que la ha devuelto a la élite del continente. Y Costa de Marfil, campeón africano y líder del Grupo F en la eliminatoria de CAF, representa quizá el proyecto más fuerte del continente gracias a su explosión generacional.
Y un Curazao, aunque con menos posibilidades de salir con vida, fue líder del Grupo B de la clasificación de Concacaf.
La combinación de cuatro selecciones que llegan como número uno en sus confederaciones marca un escenario prácticamente inédito: un grupo donde todos pueden avanzar)... y todos pueden quedar fuera. Ningún otro sector reúne tanta solidez estadística, tanta vigencia competitiva y tanta presión acumulada. Por jerarquía, actualidad y rendimiento, el F es el grupo más cruel del torneo: un cruce en el que cualquier error, incluso mínimo, puede significar un adiós prematuro para un candidato real a octavos.
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