Tomando en cuenta inversión y resultados en la cancha, Roger Martínez ha sido uno de los peores fichajes en la historia del América, sobre todo por todos los problemas que ha generado durante su estancia en el Nido que han venido aumentando con el paso del tiempo.
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Desde el verano del 2019, el atacante colombiano manifestó su deseo por salir de las Águilas, esto debido a su buena actuación en la Copa América de ese mismo año que lo puso en el radar de varios equipos de Europa; sin embargo, la ofertas que llegaron a las oficinas de Coapa no beneficiaban al club.
En invierno, América recibió la mejor oferta por Martínez proveniente del Inter Miami; no obstante, el futbolista rechazó esta propuesta porque no quería irse a la MLS. Esto desencadenó la molestia de la directiva azulcrema, pues iban a recuperar lo invertido en su fichaje y Roger tiró la negociación.
Pasaron los meses y el sudamericano seguía desinteresado en jugar en el América; al mismo tiempo, su valor iba en picada y se alejaba de volver al futbol europeo. Durante un tiempo, Martínez fue separado del plantel, aunque Miguel Herrera abogó por él y los altos mandos le retiraron el castigo.
Pese a esto, el colombiano no mejoró su actitud al grado de colmar la paciencia de todos en el club. Terminado el torneo, la relación con el jugador se volvió insostenible y fue puesto transferible. Roger pasó las vacaciones en Colombia y, aunque tiene contrato vigente con el América, no se presentó a los exámenes médicos ni al inicio de la Pretemporada junto al resto de sus compañeros.
Martínez ya fue notificado que no entra en planes del equipo para la próxima temporada, pero hoy es la fecha límite para que se presente en Coapa para revisar su situación contractual. De momento, el club contempla tres escenarios: el primero y el más favorable para la institución es encontrarle acomodo en algún club del extranjero, pues aún quedan varios días para el cierre de mercado.
En caso de no colocarlo en otro equipo, las Águilas no lo registrarían para el Guard1anes 2021 y pasaría seis meses inactivo para volver a buscarle salida en verano, aunque tendrían que seguir pagando su salario. La última opción y la que menos le convendría al club es rescindirle el contrato.
Lo que es un hecho es que Roger Martínez no volverá a jugar con la camiseta del América, ya que su relación con el club está prácticamente rota.