Con la plantilla más económica de los denominados "cuatro grandes" del futbol mexicano y sin haberse reforzado como deberían para afrontar dos torneos, los Pumas de Andrés Lillini siguen compitiendo como equipo grande y dando la cara por la UNAM.
Esta semana, los universitarios se metieron a la Final de la Concachampions dejando en el camino al Cruz Azul y consiguieron un valioso triunfo contra Rayados dentro de la Liga MX para terminar la jornada en zona de repechaje.
La victoria sobre Monterrey tuvo un valor especial, ya que obtuvieron los tres puntos jugando con 10 futbolistas y sacaron el resultados en la agonía del partido.
De la mano de Lillini, el cuadro felino ha ido cambiando críticas por elogios y logrando objetivos que se veían lejanos como llegar a la Final del Apertura 2020, eliminar al América y ser semifinalistas en el Clausura 2021 y estar actualmente en la Final de la Concacaf.
El técnico de Pumas sabe que hay otros clubes por encima del suyo, pero con trabajo y humildad siguen caminando con paso firme y dando batalla en todas las competiciones.
"Para candidato (al título), Pumas no, para ello todavía Pachuca y Tigres están ahí. Nosotros somos un equipo al que siempre nos han dado por muertos. No estamos en los favoritos y es mejor así, porque la competitividad y la humildad están por delante".
Lillini considera que la clave para tener un grupo unido y fuerte es que todos los jugadores se sienten identificados y orgullosos de vestir la camiseta de Pumas, añadiendo que podrían jugar dos partidos por día.
"El grupo me enseña constantemente algo. Sienten mucho orgullo estar en Pumas y eso es meritorio. Si hubiera otro partido hoy a las 7 de la tarde, volverían a jugarlo".
En Pumas buscarán cambiar el horario del choque ante Chivas, puesto que la carga de trabajo ya empieza a cobrar factura en el estado físico de los jugadores. Los universitarios han disputado 5 juegos en los últimos 15 días y volverán a saltar al campo este miércoles cuando visiten al San Luis en jornada doble.