- 02 de octubre de 2024
El jugador de los Kansas City Chiefs, Mecole Hardman, se perdió el Super Bowl LVII debido a que se convirtió en padre en el mismo día.
El Super Bowl es uno de los días más importantes para los jugadores que jugarán la final de la NFL, sin embargo, para Mecole Hardman, jugador de los Kansas City Chiefs, tendrá más relevancia debido a que podría convertirse en padre el mismo día, por el que no estará en Arizona.
Uno de los receptores más dinámicos de Patrick Mahomes y compañía se perderá el juego importante ante los Philadelphia Eagles, por lo que no podrá estar en el campo en la búsqueda de coronarse campeón por estar con su mujer y recibir a su primogénito.
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Fue el propio jugador de 24 años de edad quien publicó en su cuenta de Twitter que a su esposa se le rompió la fuente el domingo 12 de febrero por la mañana, por lo que dio a entender que no iba a estar reunido con el resto de sus compañeros para el Super Bowl.
Cabe resaltar que Mecole Hardman no iba a poder jugar el encuentro con los Kansas City Chiefs debido a que sufrió una lesión en la pelvis, por lo que no fue activado de la lista de lastimados del equipo, a pesar de que fue un elemento importante en la campaña regular.
El receptor fue reclutado en la segunda ronda del Draft del 2019, donde Patrick Mahomes lo sabe aprovechar por su velocidad y versatilidad para quitarse a los defensivos de encima, por lo que será una de las bajas importantes que tendrán los jefes para el super domingo.
Por su parte, quien es considerado el mejor Quarterback de la NFL tiene diferentes bajas en ofensiva y principalmente en la posición de receptor abierto, ya que además de quien se convertiría en padre, tampoco podrán contar con Kadarius Toney.
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Además, los Chiefs tampoco podrán contar con el corredor, Clyde Edwards-Helaire, quien a pesar de que pudo hacer ejercicios a lo largo de la semana, decidieron de último momento que no puede jugar, por lo que será una de las diferentes bajas que tendrán para el super domingo.
A pesar de que Mecole Hardman pudo haber estado en Arizona a pesar de su lesión, prefirió ir con su esposa a recibir a su primer hijo, en lo que quedará como una de las historias que llaman la atención del Super Bowl LVII fuera del emparrillado. Para más notas síguenos en Google News.