La nueva normalidad llegó para cambiar la vida de todos, incluso la de aquellos que parecía no resultarían afectados. En Brasil, uno de los países con más casos de Covid-19, existe una historia algo peculiar.
El protagonista es Igor Benevenuto, un árbitro profesional que decidió dejar las canchas de manera temporal para combatir al virus. Es enfermero de primera línea en la ciudad de Sete Lagos, Minas de Gerais.
En una entrevista con Marca Claro, Benevenuto reveló que durante el último año alternó las canchas de futbol con los hospitales, en los cuales era coordinador del área Covid. Reconoció que tenía un miedo constante a la muerte, aunque también se trató de un lapso gratificante.
Yo era el coordinador del área de Covid, cuidaba a todos los pacientes, trabajaba dándoles sus medicamentos. Fueron meses muy intensos, pero gratificantes, aunque varias veces regresé a casa triste, deprimido, con miedo de lo que veía. Tenía un miedo muy grande de morir".
Igor Benevenuto
Igor es considerado como uno de los centrales con mayor proyección en el futbol brasileño, pero su profesión, la de ser enfermero, lo llamó para dicha batalla. También reveló que posee conocimiento en psicología, mismos que le ayudaron para tratar a las personas.
Sus 22 años como árbitro lo ayudaron en la batalla contra el coronavirus, la cual duró de marzo a junio de 2020. Se trata de sus dos grandes pasiones, mismas que le han dejado varias enseñanzas en el camino.
El futbol me ayudó mucho en cuanto a cómo tratar a las personas. En el Hospital llega gente muy nerviosa y tensa. Traté de aplicar lo que he aprendido en el futbol porque si yo me mostraba nervioso o estresado, no podría transmitirles tranquilidad a los pacientes. Les transmitía cómo respirar, les transmití fuerza, trataba de dialogar con ellos".
Igor Benevenuto
Destacó que al regresar a las canchas empezó a valorar las cosas, una de ellas el ponerse en el lugar de la otra persona para así entender la manera en que piensan o se sienten. Señaló que todas las personas del área médica están desvalorizadas.