El futbolista mexicano que frustró su carrera debido a los nexos de su familia con el narcotráfico

No es extraño que en México las carreras de los conocidos como ´futbolistas promesa´ se frustren por factores ajenos a los deportistas, pero la historia de Pablo Tostado tuvo un giro previo, ya que su familia fue la que frustró su trayectoria luego de que se dieran a conocer sus nexos con el narcotráfico en el país.

Tostado, quien actualmente tiene 29 años y lleva varios retirado del futbol, fue campeón del mundo sub-17 con la Selección Mexicana en 2011, y es perteneciente de esa llamada ´generación dorada´ de futbolistas de los que hoy en día apenas se escucha, y luego de conseguir la gloria, fue ascendido al equipo de Primera División de las Chivas de Guadalajara.

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A pesar de que el futuro pintaba brillante para él, los buenos momentos ni siquiera le alcanzaron para una temporada completa en el máximo circuito, pues en cuanto los dirigentes rojiblancos se enteraron del pasado turbio de su familia, en particular de su abuelo y de su padre, decidieron darle la espalda y correrlo de la institución.

"Me dijeron que un familiar mío, mi papá, es procedente de esto, de lo otro, de actos que al club no le convienen, y me dicen a mí, ´ya se investigó esto, esto y esto. A lo mejor tú no tienes nada qué ver, pero de todas maneras estás fuera", confesó el joven, que luchó para construir su propio camino sin importar el de su familia al medio de ESPN.

¿Cuál fue la relación de la familia Tostado con el narcotráfico?

El exseleccionado mexicano tenía como familia a Pablo Tostado Félix, su abuelo, y a Pablo Tostado Zamudio, su padre, ambos sicarios de diferentes grupos de delincuencia organizada dedicados al narcomenudeo y secuestro de personas, ya que incluso su abuelo estuvo acusado de privar de la libertad a su propia prima, quien cumplió órdenes de parte del Cártel de Sinaloa.

El desenlace de ambas historias fue igual de oscuro, pues en distintos años ambos terminaron en la cárcel, en distintos penales, uno en Durango y el otro en Culiacán, y a pesar de que se declararon inocentes de los cargos imputados, su decisión final fue ahorcarse en su celda para morir ; el abuelo en 2009 y el padre en 2012.

Luego de que las Chivas dieran a conocer el despido de su jugador recién llegado en un comunicado totalmente falso, Pablo firmó un contrato inmediatamente con Tigres, ya que el torneo Apertura 2011 se encontraba justo a la mitad, pero al año siguiente y con la muerte de su padre, decidieron darlo en préstamo, ya que según el jugador ´ahí también consideraron que mi nombre ya se había manchado´. 

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Pablo Tostado fue cedido a Murciélagos FC, Correcaminos e Irapuato, todos en Liga de Ascenso, y a pesar de que era propiedad de Tigres, el equipo no lo apoyó cuando tuvo una lesión de rodilla que fue la que finalmente lo alejó de las canchas en 2016, y a pesar de las injusticias que vivió, asegura que no guarda resentimiento hacia los clubes.

Luego de retirarse del balompié y de vivir la ilusión de haberse convertido en campeón del mundo, Pablo fue chofer por un tiempo y hace dos años tenía la ilusión de convertirse en educador físico, además de que se dedica a impartir conferencias enfocadas en cómo el deporte puede alejar a las y los jóvenes de los malos pasos iniciados por su familia, algo que él vivió en carne propia cuando descubrió su pasión por la pelota en un contexto violento.

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