El Guard1anes 2021 de la Liga MX ha iniciado con un par de polémicas extracancha. Primero fue el árbitro Adalid Maganda, quien acusó racismo por parte de Arturo Brizio, presidente de la Comisión de Arbitraje, ante la Comisión Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).
El jueves 18 de enero, en un juego entre Santos Laguna y Atlético de San Luis correspondiente a la jornada 7, Félix Torres (jugador de Santos) recibió insultos racistas por parte de los jugadores potosinos; este caso apenas será sometido a investigación.
Pero de acuerdo a una investigación de ESPN, estos no serían los únicos casos. Un total de ocho denuncias han sido presentadas contra el futbol mexicano ante la Conapred. Desde casos de racismo hasta discriminación contra personas con discapacidad, mujeres embarazadas o integrantes de la comunidad LGBTTTI.
En el caso de la discriminación por tono de piel u origen nacional, la Conapred comunica que los números de denuncias son bajos, pero en gran medida a que estas actitudes se han "normalizado" dentro del balompié nacional.
Uno de los casos más sonados es el del grito de "pu$%" cuando el portero contrario despejaba el balón y por el que la Conapred tuvo que impartir talleres de concientización en los diferentes clubes de la Liga MX.
Otro dato reprobable es que el dos de cada tres mujeres involucradas en el futbol mexicano (jugadoras, directoras técnicas, árbitras, etc.) han sufrido algún tipo de discriminación a la hora de ejercer sus funciones.
Enrique Ventura Marcial, director de Admisibilidad, Orientación e Información de la Conapred, anunció que desde 2017 han tenido acercamientos con la Federación Mexicana de Futbol (Femexfut) para la elaboración de un protocolo contra los casos de discriminación y acoso sexual.