Los momentos más ridículos que marcaron el Apertura 2025 de la Liga MX

El futbol mexicano dejó este semestre una colección de momentos tan insólitos como ridículos, escenas que no definieron campeonatos, pero sí marcaron la conversación, los memes y la memoria colectiva. En el podcast Silbatazo Referee, el repaso fue claro: hay jugadas que trascienden por lo absurdo, lo chusco o lo inoportuno, y que terminan retratando mejor que cualquier análisis el espíritu caótico de la Liga MX.

Uno de los episodios que encabezó la conversación fue el penal fallado de Javier "Chicharito" Hernández ante Cruz Azul. Para Adrián Vargas, esa falla definirá el semestre: un cobro en momento crucial que terminó "mandando la pelota a la luna". Luis Estrello coincidió en que la jugada quedó "enmarcada" y que será recordada durante años como material inagotable de memes, no solo por el error, sino por todo lo que representa Chicharito en el futbol mexicano.

El gran ridículo del América

Otro momento que provocó risas e incredulidad fue el protagonizado por el América en la serie contra Monterrey. Con el partido bajo control, el rival con un hombre menos y el reloj avanzando, el estadio decidió poner "Mi Mayor Anhelo", la canción emblemática del americanismo, celebrando una clasificación que parecía segura. El guion se rompió de inmediato: apareció Germán Berterame y marcó el gol, el estadio se silenció y la fiesta se vino abajo. Para Estrello, fue una "cerradota de boca" a la directiva y a quienes autorizaron celebrar con el balón en movimiento, un recordatorio de que en el futbol no se festeja antes de tiempo.

El listado de momentos absurdos se completó con una escena completamente fuera de lógica: Saint Maximán arrollando al árbitro Luis Enrique Santander en un partido contra Toluca. Pedro Hernández recordó ese choque como uno de los episodios más extraños del torneo, no por polémica arbitral, sino por lo inesperado de la acción.

A estos se sumaron otros pasajes curiosos, como el panenka de Gilberto Mora y la reacción de Sebastián Abreu, escenas que no fueron escándalo, pero sí dejaron huella.

El consenso en Silbatazo Referee fue claro: el semestre quedará en la memoria no solo por lo deportivo, sino por errores, excesos de confianza y momentos surrealistas que confirmaron que la Liga MX también se explica a través del ridículo.

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