¡Una lana!
Lo que se pudo comprar el aficionado de Cruz Azul con lo gastado en Qatar
El amor por Cruz Azul no tiene límites para algunos aficionados quienes tiraron la casa por la ventana para ir a Qatar
Cruz Azul aterrizó en Doha preparado para competir, pero el sueño de la Copa Intercontinental terminó con una derrota. Lo que prometía ser una experiencia deportiva atractiva se convirtió en una dura lección para el club y su afición: la distancia, los costos de viaje y las exigencias logísticas recuerdan lo complicado que resulta acompañar al equipo en una aventura global.
No obstante, aunque el desenlace no fue el ideal, la realidad es que un fanático dispuesto a acompañar a La Máquina habría tenido que invertir una suma considerable. Desde boletos, vuelos, hospedaje y alimentación: los gastos no son menores, pero sirven para dimensionar lo que representa un viaje así desde México.
Te puede interesar: La eliminación de Cruz Azul tiene dos nombres: Piovi... y Larcamón
Los miles de pesos que habría requerido un aficionado de Cruz Azul para viajar a Qatar
Vuelos: una inversión mayor a lo esperado
Un vuelo redondo de Ciudad de México a Doha —ida y vuelta en clase económica— ronda los MXN 18,700–19,000 según las ofertas recientes.
Para un aficionado que compró boleto, transporte y regresó, ese gasto representa ya una partida considerable antes de sumar hospedaje o alimentación.
Boletos al partido: lo más barato fue simbólico
Los boletos más económicos para ver Cruz Azul vs Flamengo costaron apenas 20 QAR, equivalentes a ~99 pesos mexicanos. Las entradas más costosas llegaron a 50 QAR (~249 pesos). Esa diferencia evidencia que, aunque el pase al estadio fue barato, el verdadero gasto vino con logísticas internacionales y estancia.
Hospedaje y vida en Doha: realidades distintas
Aunque no hay cifras oficiales recientes precisas para hoteles económicos en Doha, datos de costo de vida local muestran que un transporte público tiene tarifas muy accesibles y las comidas en restaurantes modestos —hamburguesas, menús del día— suelen costar entre 6 y 8 USD.
Si el aficionado tuvo que pagar vuelo, hotel (aunque modesto), alimentación y extras, su gasto total se habría acercado más a lo que cuesta un paquete completo de viaje internacional... mucho más allá del valor simbólico del boleto.
Un gasto grande para ir a la Copa Intercontinental
El boleto más barato al partido fue prácticamente simbólico en el contexto total. Quien viajó a Doha invirtió una suma considerable: por lo menos MXN 20,000–25,000 sólo en transporte aéreo ida y vuelta, sin contar hotel, comida y otros gastos. Si sumamos hospedaje, comidas, transporte local, recuerdos —y posibilidad de acompañantes—, el gasto real sube fácilmente a MXN 30,000–40,000 o más.
Eso convierte a la experiencia en algo reservado más a quien puede invertir fuerte por hinchismo que a un viaje accesible para el aficionado promedio. El contraste entre un boleto simbólico y el costo real de vivir la experiencia completa deja en evidencia que, en estos casos, la pasión tiene un precio alto.
Te puede interesar: Los mejores memes que dejó la derrota de Cruz Azul vs Flamengo
Con ese dinero... ¿qué más se podía comprar en México?
- Con 30–40 mil pesos en México hoy puedes hacer cosas bastante distintas:
- Comprar una motocicleta de gama media.
- Adquirir una laptop de buena gama o una consola + videojuegos + accesorios.
- Irte de vacaciones nacionales de 5–7 días con hospedaje y comida incluida.
- Cubrir varios meses de renta o colegiatura universitaria en muchas ciudades del país.
Para un aficionado común, ese tipo de gasto representa un sacrificio enorme. Pero para quienes son verdaderamente fanáticos, la experiencia de ver a su equipo contra un grande mundial pesa más que las cifras.
El futbol mexicano y todo lo relevante al deporte lo encuentras en nuestro canal de YouTube o Whatsapp
