- 16 de noviembre de 2025
El capitán del Tri expresa su descontento ante reacción de los seguidores en el Estadio TSM.

Salió Molesto con la Afición: Las Palabras Que No se Vieron de Edson Álvarez Tras el Empate Contra Uruguay
La noche del sábado en el Estadio TSM de Torreón debió ser una fiesta.
Un partido amistoso de la Selección Mexicana ante Uruguay, rival de jerarquía, en el camino hacia el Mundial 2026.
Sin embargo, el pálido empate sin goles y, sobre todo, la reacción hostil de la afición, convirtieron el cierre del encuentro en un auténtico polvorín. Los abucheos, el grito de "¡Fuera Vasco!", y los silbidos constantes a la joven promesa Raúl 'Tala' Rangel, terminaron por colmar la paciencia de un líder silencioso: Edson Álvarez.
¿Cuál fue la reacción de Edson Álvarez tras el empate?
El capitán del Tri y mediocampista del Fenerbahçe no se guardó nada. Mientras se dirigía al vestidor, captado por las cámaras de manera furtiva, soltó una frase cargada de sarcasmo y profunda desilusión que resume el sentir de una parte del vestidor. No fue en zona mixta, ni ante los micrófonos, sino en el túnel, con el rostro desencajado por la frustración y la rabia.
La Bomba Sarcástica del 'Machín'
"Qué lindo es estar en casa, eh. Qué lindo es estar en casa", repitió Álvarez con un tono de voz que no dejaba lugar a dudas sobre la ironía de sus palabras.
Para el capitán, la actitud del público lagunero estuvo muy lejos del apoyo incondicional que se espera cuando se juega en territorio nacional. El TSM, que se suponía un fortín, se sintió como una cancha ajena, un lugar donde el propio equipo fue el blanco principal de las críticas.
La molestia de Álvarez, al igual que la expresada minutos después por su compañero Raúl Jiménez, tiene varios frentes. El principal: el trato injusto y desmedido hacia el joven arquero Raúl Rangel. Desde que se anunció que no sería Carlos Acevedo (ídolo local) el titular, el 'Tala' fue víctima de silbidos cada vez que tocaba el balón, una presión que rebasó lo deportivo y se incrustó en el plano personal.
¿Qué impacto tuvo la actitud de la afición en el equipo?
No es sólo el resultado, es el trato.
La afición manifestó su descontento por el 0-0 y por la decisión del cuerpo técnico de Javier Aguirre de no alinear a Acevedo.
Sin embargo, para los jugadores, la línea se cruzó cuando los gritos se tornaron en injurias y peticiones de despido para el entrenador. Álvarez, quien es uno de los líderes naturales de esta generación, ve en este tipo de comportamientos una falta de respaldo crucial en momentos de construcción de cara a la Copa del Mundo que se jugará en casa.
"Lo que deja triste es jugar de local y que te abucheen, que fuera Vasco, que le griten p... al portero. Eso es lo que deja tristeza la verdad, pero bueno, así es esto, tal vez por eso siempre nos llevan a Estados Unidos", había declarado, también visiblemente molesto, Raúl Jiménez, coincidiendo plenamente con el sentir de su capitán.
El señalamiento es claro: si la afición en México no brinda el ambiente de "casa" que el equipo necesita, la Federación siempre tendrá el pretexto perfecto para llevar los partidos a canchas estadounidenses, donde el apoyo, aunque con matices de negocio, suele ser menos hostil.
El Mensaje a la Tribuna
Las palabras de Edson Álvarez, captadas sin el filtro de una conferencia de prensa, son un espejo de la frustración interna del equipo. El mensaje es directo a la tribuna: la crítica es válida, pero el abucheo sistemático al portero en su debut o la petición de "Fuera Aguirre" a menos de un año del Mundial no ayuda, sino que dinamita la moral del grupo.
El "Machín" es conocido por su garra, y esta vez, esa garra se dirigió hacia el público. Seamos claros: la Selección Mexicana no jugó bien ante Uruguay.
El funcionamiento fue pobre y el empate, en términos de juego, pudo sentirse a derrota. Pero en el contexto de un amistoso para probar jugadores y esquemas, el capitán ha puesto un tema sobre la mesa: el verdadero costo de jugar "en casa" cuando la afición se convierte en el adversario más ruidoso.
La frase irónica de Álvarez resuena fuerte y claro. ¿Qué tan 'lindo' es realmente jugar como local cuando el ambiente es de hostigamiento? La respuesta del capitán fue un dardo directo al corazón de una afición que exige, pero que a veces olvida su rol de apoyo. El Tri tendrá que lidiar con esto, pero la fractura entre equipo y tribuna, gracias a las palabras del líder, ha quedado expuesta.
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