En un partido correspondiente a la jornada 19 de la Premier League, Fulham y Chelsea se enfrentaron en el estadio Craven Cottage. Ambos equipos viven realidades muy distintas: mientras el Fulham está en la posución 18 y en zona de descenso; el Chelsea marcha séptimo y en búsqueda de llegar a puestos europeos.
El encuentro terminó 1-0 a favor de los dirigidos por Frank Lampard, gracias a un gol de Mason Mount. Aunque el partido no tuvo mayores novedades, un acto realizado al final del mismo se ha convertido en tendencia porque raya en lo insólito.
Thiago Silva, defensa del Chelsea y la selección brasileña, regaló su camiseta a uno de los albañiles que laboran en las obras de remodelación del Craven Cottage. Este simple acto le acarrearía una sanción por parte de la Asociación Inglesa de Futbol.
El motivo es simple: el Covid-19. Desde la reanudación del futbol inglés tras el cese de actividades por la pandemia, en julio de 2020, los jugadores tienen prohibido intercambiar camisetas o regalarlas en caso de haber público en las gradas.
Hace una semana, en el partido entre Marine y Tottenham, los dirgidos por Jose Mourinho regalaron camisetas nuevas, así como previamente sanitizadas, a sus rivales para que tuvieran un grato recuerdo del encuentro correspondiente a la FA Cup.