Roman Abramovich, dueño del Chelsea, ha salido involucrado de manera indirecta en el conflicto entre Rusia y Ucrania y un diputado ha pedido retirarle varios de sus derechos y bienes en el Reino Unido.
El diputado laborista Chris Bryant presentó una petición ante el Parlamente Británico para requisarle sus bienes en Inglaterra y ser investigado por sus presuntos vínculos con Vladimir Putin, presidente ruso.
El propietario del Chelsea ha sido señalado por Alexei Navalny, líder de la oposición rusa, como uno de los oligarcas que apoyan a Putin, algo que el empresario ruso ha negado desde hace años.
"Abramovich sigue siendo un asunto de interés para el país por sus enlaces con Rusia y por su asociación con actividades corruptas. El Gobierno está centrado en asegurarse que aquellos individuos que están relacionados con financiación ilícita y con actividades delictivas no pueden asentarse en el Reino Unido, y usaremos todas nuestras herramientas, incluyendo las leyes inmigratorias, para prevenirlo", declaró el diputado ante el Parlamento.
Además de ser dueño del Chelsea, el magnate ruso posee en Reino Unido una mansión con valor de más de 150 millones de euros, superyates como el Solaris de 540 millones de euros y la empresa de minería y acero, Evraz, que cotiza en la bolsa de Londres.
Anytime UK is freezing Russian billionaires account including the @ChelseaFC owner Roman Abramovich pic.twitter.com/XwGwXwFyFj
Sir Almajor�� (@tumukundemosesk) February 24, 2022
Roman Abramovich ha limitado sus visitas a Inglaterra desde 2018 cuando le retiraron su visado de inversor a raiz de la tensa relación entre Rusia y RU luego de que un exespía ruso del M16 y su hija fueran envenenados en la ciudad de Salisbury y tuvo que pedir la ciudadanía israelí para poder usar su pasaporte.