El Gran Premio de Mónaco es una de las carreras más desafiantes del calendario de la Fórmula Uno debido al diseño del circuito de Mónaco, donde hay muchas curvas y es angosta.
Los pilotos de los equipos con monoplazas no tan competitivos aprovechan el diseño de la pista callejera de Monte Carlo a su favor para estar en la pelea en la zona de puntos e incluso soñar con subir al podio.
Algo que Sergio ‘Checo’ Pérez puede presumir que consiguió en la edición 2016 del Gran Premio de Mónaco porque contra todo pronóstico logró meterse al podio.
Además, la lluvia fue un factor importante en esa carrera, lo que el mexicano utilizó a su favor para su estrategia para superar a sus rivales.
Lluvia, factor que cambió la carrera
Después que en las prácticas y clasificación hubo cielo despejado en las calles de Monte Carlo, la lluvia hizo acto de presencia en el día de la carrera y causó que iniciara detrás del auto de seguridad.
El mexicano largó en la posición siete y después de siete vueltas, la carrera pudo iniciar bien y esto lo aprovechó ‘Checo’ para rebasar a dos rivales y colocarse en el puesto cinco.
Cuando la lluvia empezó a bajar, el piloto, en ese entonces de Force India, fue de los primeros en parar a pits para cambiar a los neumáticos intermedios de lluvia cuando lo hizo en la vuelta 21 y eso lo ayudó a superar a varios rivales porque pudo salir dentro de los lugares del podio.
Para la vuelta 30, el mexicano otra vez entró a pits antes que sus rivales, Sebastian Vettel y Nico Rosberg, para que a su monoplaza le pusieran llantas para pista seca y apostó por los blandos; volvió a regresar al circuito delante de ellos, ubicado en el tercer lugar, y el resto de la carrera fue importante cuidar sus neumáticos para tener la posibilidad de subir al podio.
A pesar de la presión de Vettel durante gran parte de la carrera, el piloto azteca la aguantó para quedarse con el puesto tres y subir otra vez al podio; quedó detrás de Daniel Ricciardo y Lewis Hamliton, quien ganó la carrera.
“La clave de mi carrera fue la estrategia y hoy conseguimos cosas casi perfectas... El cambio a neumáticos secos fue otro momento clave porque entré a pits temprano, una vuelta antes de Rosberg y Vettel, y logré saltar por delante de ellos... Los neumáticos blandos funcionaron muy bien, pero sabía que tenía que cuidarlos y no fue fácil porque había mucha presión de Vettel durante la mayor parte de la carrera”, dijo el mexicano después de la carrera.
Este tercer lugar en la edición 2016 del GP de Mónaco es la única vez que el ‘Checo’ subió al podio en el Principado.