La denuncia sobre los uniformes de las jugadores de softbol que dejaron en el bote de basura ha hecho mucho eco entre la comunidad deportiva mexicana, ya que defienden que la indumentaria olímpica se convierte en un tesoro especial para los atletas.
Al menos eso representó para Itzel Manjarrez, extaekwondoín mexicana, quien acudió a los Juegos Olímpicos de Río 2016, en el equipo de Taekwondo, al lado de la multimedallista, María del Rosario Espinoza.
Manjarrez aprovechó para mandar un mensaje contundente sobre lo ocurrido con el equipo de sóftbol y su sentir de cuando ella recibió su uniforme para representar a México en Río 2016.
El día en que me dieron mi kit de uniformes con mi bandera y los aros olímpicos estampados fue uno de los días más esperados de mi vida", escribió en su cuenta de Twitter.
La extaekwondoín reconoció que ella jamás los hubiera desechado porque tienen un valor sentimental muy especial.
Aún los guardo y me siento orgullosa de ellos, nunca los tiraría a la basura y sin dudar pagaría el exceso de equipaje", dijo.
Aunque entre algunos de sus seguidores causó controversia, el tema de los uniformes ha generado opiniones en contra y a favor de las jugadoras de softbol.
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