Andy Ruiz marcó historia en el boxeo al convertirse en el primer pugilista mexicano en coronarse campeón del mundo en la división de peso pesado. Venció a Anthony Joshua en junio del 2019 y se encontraba en las nubes, pero cuando cayó en diciembre de ese mismo año, entró en depresión.
El oriundo de California, Estados Unidos, probó la gloria luego de vencer a Anthony Joshua en sólo 7 rounds con un KO fulminante. Ganó mucho dinero, fama y atención, misma que sólo le duró algunos meses y luego perdió sus cinturones.
One Year Ago Today: Andy Ruiz, Anthony Joshua, Madison Square Garden, ýýýýýýýýýýýýýý ó pic.twitter.com/fqb88DoEYq
DAZN Boxing (@DAZNBoxing) June 1, 2020
El boxeador mexicano norteamericano se confió de más y no se preparó como era debido para la revancha con Joshua, hecho que lo hizo caer el 7 de diciembre del 2019 por decisión unánime. Cuando se confirmó la derrota, Andy Ruiz pasó por una grave depresión.
Fue el punto más bajo. Cuando perdí, solo quería meterme debajo de mi cama, esconderme y comerme Cheerios", confesó Andy Ruiz a MailSport.
El boxeador confesó que el golpe de la derrota fue muy duro y no físicamente, sino en lo anímico. Estaba de mal humor, molesto con todos e incluso decidió encerrarse en su casa para no ver a nadie.
Andy Ruiz aprendió una lección muy importante, según platica, y es que comprobó que hubo gente que lo apoyó y siguió mientras lo tenía todo, pero cuando perdió con Joshua, todos se fueron.
Me encerré como una tortuga. Hubo momentos en los que salía de fiesta, pero eso era porque mi corazón estaba vacío. Estaba deprimido, estaba enojado conmigo mismo. Es una locura cómo, cuando estás en la cima, todos están contigo, apoyándote. Pero cuando pierdes, mucha gente se dispersa", dijo el boxeador mexicano.
Hoy en día Andy Ruiz entrena con el equipo del "Canelo" Álvarez y su ánimo ha mejorado. Se ha dedicado de lleno al gimnasio, ha bajado de peso, recuperó la confianza que había perdido y está listo para su siguiente combate.
"Destroyer" volverá al ring el próximo 1 de mayo en el Dignity Health Sports Park de Carson, California, cuando se mida a Chris Arreola luego de poco más de un año sin actividad.