- 01 de enero de 2025
Rickey Henderson, uno de los mejores corredores de bases en la historia de las Grandes Ligas, jugó para 9 equipos durante su carrera
Rickey Henderson, quien falleció el pasado 20 de diciembre, fue mucho más que un simple jugador de béisbol. Fue un huracán en las bases, un icono del deporte y una leyenda que dejó una huella imborrable en las Grandes Ligas.
Con 1,406 bases robadas, Henderson es y será por mucho tiempo el rey indiscutible de esta estadística. Su velocidad era tal que parecía desafiar las leyes de la física, dejando a los lanzadores y a los fildeadores completamente desconcertados. Pero su legado va más allá de los números.
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Henderson era un espectáculo en sí mismo. Su carisma, su personalidad extrovertida y su pasión por el juego lo convirtieron en uno de los peloteros más queridos por los fanáticos. Su capacidad para conectar con la audiencia era única, y su presencia en el terreno siempre garantizaba un momento emocionante.
Además de sus habilidades en las bases, Henderson era un bateador excepcional. Su capacidad para llegar a base por cualquier medio lo convirtió en una pesadilla para los pitchers rivales. Su inteligencia en el juego y su conocimiento del béisbol eran evidentes en cada turno al bate.
Rickey Henderson, uno de los mejores corredores de bases en la historia de las Grandes Ligas, jugó para 9 equipos durante su carrera.
Carrera de Rickey Henderson
- Oakland Athletics (1979-1984, 1989-1993)
- New York Yankees (1985-1989)
- Toronto Blue Jays (1993)
- San Francisco Giants (1993-1994, 2002)
- Anaheim Angels (1997)
- Seattle Mariners (2000)
- New York Mets (2000)
- Boston Red Sox (2002)
- Los Angeles Dodgers (2003)
Algunos de los logros más destacados de Rickey Henderson:
- Líder histórico de bases robadas (1,406)
- Líder histórico de carreras anotadas (2,295)
- 13 veces líder de la liga en bases robadas
- 10 temporadas con 100 o más carreras anotadas
- 10 veces seleccionado al Juego de Estrellas
Rickey Henderson fue mucho más que un jugador de béisbol. Fue un pionero, un innovador y un verdadero artista del deporte. Su legado inspirará a futuras generaciones de peloteros y su nombre siempre será recordado como uno de los más grandes de la historia de las Grandes Ligas.